trocitos pequeños y el tomate rayado y
sin las pepitas (no hace falta que
las saqueis todas!!!). Cuando se haya
reducido un poco, añadir el vino
negro y dejar reducir y que se
evapore. (No olvidar de ir añadiendo sal a
todos los ingredientes que vayamos
introduciendo en la cazuela).
Hacer una picada con las
almendras tostadas, el ajo y el perejil. Diluir
con un poquito de caldo y añadir a la
cazuela.
Introduir de nuevo las
mejillas de cerdo en la cazuela con una hoja de
laurel y el resto del caldo.
Cocer todo esto tapado en el horno
durante una media hora (ya vereis cuando
está cocido del todo).
Mientras estén las mejillas en el
horno hervir las zanahorias cortadas a lo
largo, con una cucharadita de azúcar,
hasta que estén tiernas. Añadir a la
cazuela.
Hervir las alcachofas limpias
de las hojas más feas y cortadas por la
midad, con agua y un poco de sal. Una
vez hervidas enharinar y freir en una
sartén con aceite bien caliente.
Cuando falten cinco minutos para terminar
la cocción de las mejillas de cerdo
añadir a la cazuela.
0 comentarios:
Publicar un comentario